Un año más, nuestro puente de San Juan transcurre por las calles de Madrid, de exposición en exposición, para descubrir lo que ofrece PhotoEspaña 2015, que en esta 18ª edición está dedicado, de forma monográfica, a la fotografía latinoamericana. Aunque en esta ocasión ninguna exposición ha supuesto una gran revelación (creo que Antoni Arissa y Chema Conesa dejaron el listón muy alto el año pasado), sí que hemos visto algunas muestras interesantes, tanto de propuestas contemporáneas como de viejos fotógrafos conocidos.
Y aunque sean fotografías fotografiadas, aprovecho que cargaba con la cámara para hacer un repaso de nuestra ruta con imágenes de las diferentes exposiciones visitadas, incluyendo algunas que no se incluían dentro del Festival.
El recorrido del día 1 es, tal vez, un poco irregular, pero era domingo y había que cuadrar horarios de museos que, no entiendo muy bien por qué, cierran al mediodía o ni siquiera abren:
- Empezamos por una de las imprescindibles. Aún no he pasado de la página la página 47 del «Hasta aquí hemos llegado» (y tiene más de 500), pero en realidad poco podría decir más de Enrique Meneses. Uno de los grandes periodistas que supieron aprovechar además todas las ocasiones para convertir la noticia en imagen. Imágenes que pasarían a la historia (recordar, por ejemplo, que fue el único que consiguió llegar hasta las milicias rebeldes cuando la revolución cubana), aunque en este país nos cueste reconocer a nuestros referentes. La exposición está en la Sala Canal de Isabel II hasta el 26 de julio.
- Segunda parada, Jardín Botánico. Un lindo lugar en el que disfrutar no solo de las exposiciones, sino sobre todo del camino hasta ellas. Lástima que con este calor ya no quedaban muchas flores. Pero a lo que vamos, aquí se pueden ver dos pequeñas exposiciones, «Un legado de luz«, de Julio Zadik, y «Mitos y Ritos«, de Mario Cravo. Personalmente me quedo con la primera. La segunda no está mal, pero creo que la explicación inicial te despista un poco y hace que te esperes una fotografía mucho más «artística» de la que nos encontramos. Ambas se pueden visitar hasta el 2 de agosto.
- Caminamos un poquito y después de un intento frustrado de entrar al Reina Sofía (las exposiciones de PhotoEspaña en domingo cierran al mediodía), bajamos hasta la Tabacalera. No había, todavía, ninguna exposición de PhotoEspaña (Resonancias se inauguró el 2 de julio), pero solo por entrar al recinto ya vale la pena el paseo y «Escenarios de la confrontación«, de Ciuco Gutiérrez, bien podría haberse incluido en el Festival:
Además, se pueden encontrar otras exposiciones que, por su exceso de contemporaneidad, chocan con el escenario de la antigua fábrica de tabaco. Dan qué pensar:
- Y por último, el Matadero, otro de esos lugares a los que vale la pena ir, aunque sea solo por el recinto. Aunque la verdad es que siempre encuentras algo interesante, con apuestas por el arte conceptual y contemporáneo que te dejan un poco descolocada. Aún así, la exposición de PhotoEspaña de este año era bastante moderada: «Europa: paisajes de invierno«, de Florentino Díaz, muestra en una construcción que imita una casa, diferentes fotografías recogidas a lo largo de la historia en mercadillos, coleccionistas, etc. Estará en el espacio ‘Abierto por Obras’ hasta el 3o de agosto. Y saliéndonos completamente del tema, ya que estáis por allí, visitar la muestra «Tapas» (hasta el 19 de julio), os sorprenderéis con los utensilios (útiles o no tanto) que se muestran.