Hoy partimos hacia el este. Tomamos un nuevo «camino» hacia Praga y Budapest. Todo será muy diferente a nuestro recorrido de hace un año: las sensaciones, la gente, las costumbres, el esfuerzo…
Y pase lo que pase estos días sé que a la vuelta nada será lo mismo porque hace tiempo que todo está cambiando. Sólo espero que la dirección que decidamos tomar sea la correcta y nos lleve a cumplir retos y recuperar sueños perdidos.