Pasar un fin de semana en la montaña es una de las mejores ideas que se pueden tener. Y si tienes la suerte de que el tiempo acompañe aún mejor. Y estos dos días en el Berguedà han sido maravillosos. Paisajes increíbles, días de sol que suavizaban un poco el frío intenso del Pirineo, mucha tranquilidad y buena compañía. No se puede pedir mucho más .
El hostal estaba en Castellar de n’Hug. Era un local modesto pero muy bien arreglado. Una de esas casitas de montaña de piedra y madera que tan acogedoras parecen siempre. Solo le sobraban algunos inquilinos que no saben controlar a sus hijos a las siete de la mañana … Bueno, y la escandalosa fanática de Ronaldinho. Sin palabras.
En dos días visitamos muchos pueblecitos y lugares de los alrededores. Las Fuentes del Llobregat, la hermita de Sant Joan de Cornudell, Bagà, La Pobla de l’Illet y Sales y Gósol a los pies del Pedraforca. Todo esto con las montañas nevadas de fondo. Y para redondear un fin de semana casi perfecto una visita rápida a Andorra…
Aunque además de la tranquilidad y los paisajes de este fin de semana me quedo con la compañía, las risas y el buen rollo. Aunque no siempre sé actuar de la mejor manera y me pierdo en mis propios pensamientos, espero que haya entendido que no soy tan fría como parezco y que conseguir mantener la cabeza en su sitio a veces no es tan fácil… Menos aún cuando entra en escena el corazón .
Sólo espero que pase lo que pase nunca perdamos esta amistad que ahora nos une, porque para mi es el mejor regalo que me pueden hacer…