Cuando una lleva desde los 16 años recorriendo el mundo en viajes de diferentes formatos, se da cuenta que a todos les acaba faltando algo: si te vas de Interrail, no tienes ni un duro para visitar monumentos, si te vas de cooperante, conoces bien a la población pero no tienes tiempo para visitar el país, y si te vas en plan todo organizado, al final conoces la zona a través de las rutas que marca la guía pero sin ningún contacto con la realidad local… Y es en este contexto, intentando conseguir el viaje perfecto, que Alice Fauveau se embarca en la aventura de Focus on Women, un proyecto que va mucho más allá de una agencia de viajes tradicional y que ofrece la posibilidad de conocer el mundo a través de las mujeres que lo habitan. Por el camino a conseguido muchas amigas y una socia, Lupe Escoto, quien se sumó al proyecto a principios de 2011.
1. Una agencia de viajes para mujeres… ¿Cómo surge la idea?
Lo que yo quería era unir en un solo viaje todos los elementos que hacen interesante un viaje: estar en contacto con la gente del país que se visita, conocer la parte monumental y, sobretodo, ayudar a la gente del país, porque es una parte que siempre me ha preocupado.
2. ¿Y por qué mujeres?
Viendo un poco como funcionaba el mercado me centré en mujeres porque me pareció que cada vez había más que compraban viajes o que las veías en viajes en grupos organizados pero que la oferta del mercado español no tenía una respuesta interesante para ellas. Entonces pensé que sería buena idea crear un producto específico para la mujer que cubriese todos los francos: el social, el de comunicación e interrelación con las mujeres de esos países y que te enseñen cosas, y el turístico. Y estando de cooperante en Perú, en una noche de insomnio me dije:”Voy a hacer un business plan”. Y ahí, en medio del Altiplano, me puse a hacer un plan de negocio. Y cuando llegué a España lo puse en funcionamiento. Esto era en 2009.
3. Me imagino que empezar debió ser duro…
Duro, durísimo. Fue una pesadilla porque el sector turístico y las agencias de viaje tienen unas barreras de entrada muy duras, es complicadísimo conseguir las licencias, los seguros, el aval bancario… todo lo que te piden. Los primeros meses suponen un desgaste de energía enorme para poder ponerlo todo en marcha. Pero estoy acostumbrada a que las cosas no sean fáciles…
4. Y dejando a un lado esa parte más administrativa, ¿cómo fue la acogida de la gente?
Al principio hubo una doble acogida. Una muy buena, de gente que pensaba que era algo original, innovador, distinto a lo que había en el mercado… Y luego, gente que no entendía muy bien el negocio y a la que tenías que explicarle el por qué, el por qué para mujeres… Quizás es que las mujeres somos más desconfiadas al principio y tenemos que probarlo, tienen que recomendártelo… Pero en general la acogida fue buena, sobretodo por parte de las clientas y de la prensa.
5. ¿Y los hombres que opinan de todo esto?
(Risas) Hay de todo. Hay hombres que en seguida rechazan la propuesta y otros que se vinculan con ella, la apoyan, la promueven entre sus amigas y regalan viajes a sus mujeres o familiares. Pero en general, una vez les contamos lo que hacemos, el propósito de nuestros viajes, que vamos allí a conocer a otras mujeres y que esas mujeres en cuanto ven un hombre cambian su actitud, su manera de hablar y de comportarse, lo entienden perfectamente porque muchos lo han vivido. Al principio quizás costaba un poco más, pero con el tiempo cada vez surge menos la pregunta de ¿y por qué mujeres?
6. En España habéis sido las pioneras en este tipo de negocio. ¿Existen empresas similares fuera?
En Estados Unidos existen este tipo de agencias desde aproximadamente 1.900. La primera estaba en Alaska y se montó para organizar viajes con mujeres que hacen deportes de aventura. Creo que esas primeras estaban más enfocadas a temas deportivos y con los años se fueron desarrollando hacia otros campos pero centrándose más en viajes turísticos y no poniendo demasiada importancia en los temas sociales y de contacto con la población local. Pero funcionan muy bien.
7. Y si funcionan allí, ¿por qué no iban a funcionar en España?
Por supuesto. Yo sigo creyendo que en España es un modelo de negocio que puede funcionar muy bien, lo que pasa es que para todo hay momentos. Y en función de los países se tarda más o menos en que la gente entienda el concepto y lo disfrute.
8. Y en el camino por conseguir construir el viaje perfecto, se suma Lupe a la aventura. ¿Qué es lo que te atrajo a ti del proyecto de Focus on Women?
A mi me atrajo muchísimo el enfoque de ir a conocer otras culturas desde el punto de vista de las mujeres. Porque incluso el poder hablar con una mujer es algo que yo, que he viajado mucho, con grupos más grandes, más pequeños e incluso sola, encuentro muy complicado en según que países. En muchos lugares de Asia, por ejemplo, son muy poco accesibles, no puedes acercarte a ellas porque no están en las calles, no hablan inglés, no habitan en el sector turístico. Así que me parecía muy interesante poder acceder a una cultura desde ellas y además ayudarlas, intentar poner nuestro granito de arena para sacar adelante iniciativas en su apoyo.
9. ¿Cuál fue vuestro primer viaje?
Fue Marrakech porque, como especialista en economía árabe, pensé que era una zona interesante en la que empezar a aprender cuál es el rol de la mujer en una cultura dominada por el hombre. Monté ese primer viaje con un grupo de amigas que no se conocían de nada porque quería hacer un viaje piloto. Así que mandé un mail a todas ellas para que vinieran como clientas y valoraran el servicio como un viaje que habían contratado. Se me apuntaron muchas, se lo pasaron pipa, les encantó y el viaje fue un éxito. Desde entonces el viaje a Marrakech sale muy recurrentemente.
10. ¿Y después de Marrakech?
Después surgió Perú, un país que conocía muy bien también y donde la mujer tiene un papel difícil. Luego Malta, Sicilia… Fueron saliendo poco a poco varios destinos y cada uno con un enfoque distinto, pero siempre basándose en descubrir el país a través de los ojos de las mujeres.
11. No debe ser fácil montar un viaje así, pero ¿cuál consideráis que ha sido el más complicado?
Sicilia. Seguramente porque lo que se quería hacer allí era bastante específico y conseguir todos los elementos para llevarlo a cabo era complicado. De todas maneras, organizar cualquier viaje es complicado partiendo de la base que te tienes que ir al país, buscar actividades específicas que se salgan por completo de lo que se está ofreciendo, establecer relaciones personales con los proveedores… y esto no se hace en dos días.
12. Seguro que ya estáis preparando un viaje nuevo…
Si, estamos preparando un viaje a Irán que seguramente se aplazará para el año que viene por el contexto de tensión internacional. Pero es un lugar que para hacer un viaje entre mujeres puede ser muy interesante porque es muy desconocido. Aquí tenemos muchos prejuicios hacia esas regiones pero las mujeres iraníes que hemos llegado a conocer son personas encantadoras y de una riqueza cultural increíble. No obstante, para nosotras la seguridad es muy importante y no tiene sentido lanzar un viaje en la situación actual.
13. De tanto viaje y actividades con diferentes grupos de mujeres seguro que salen muchas anécdotas. ¿Alguna a destacar?
Anécdotas… ¡muchas! ¿Tú has visto un camello rodeado de amapolas en medio del desierto? A que no, pues nosotras sí (risas). En serio, tenemos miles de anécdotas, pero quizás una de las más bonitas fue cuando, en uno de los viajes a Vietnam, nos acompañaba una viajera que era monja budista y, en una pagoda cerca de la Montaña de Mármol, pudimos compartir una oración con una monja vietnamita y nuestra compañera. Fue algo como muy mágico, que te ayuda a integrarte completamente en el ambiente de una manera muy especial.
14. Después de tres años de experiencia, ¿qué conclusión sacáis?
Después de todos los viajes que hemos hecho y de compartirlos con más de 200 viajeras durante estos tres años, podemos asegurar que la acogida es fantástica, que todos los grupos vuelven encantados, ilusionados con sus compañeras de viaje, con el viaje en sí, con la gente que han conocido allí…
15. Viajeras que repiten…
Somos muy activas y siempre estamos organizando saraos: que si encuentros, que si vamonos aquí todas juntas, que si concursos… y la verdad es que las viajeras que ya nos conocen responden muy bien y se apuntan a todo, y de las que no nos conocen son muchas las que vienen a conocernos en eventos de este tipo. Tenemos una tasa de fidelización muy alta, lo que es un orgullo para nosotras porque quiere decir que el producto es bueno y el nivel de satisfacción del cliente también.
16. Al inicio de esta charla comentabais que la responsabilidad social es uno de los pilares básicos de Focus on Women.
Si. Y este año la estamos promoviendo aún más con diversas acciones para dar a conocer y apoyar los proyectos en los que estamos involucradas directa o indirectamente. Por ejemplo, exponemos en Madrid las fotografías finalistas del Concurso Internacional de Fotografía Femenina “Mujeres con Focus”, también estamos organizando una subasta fotográfica para recaudar fondos para estos proyectos, etc. Es decir, que Focus on Women no sólo son viajes, sino que tiene una parte social muy importante.
17. ¿Visitáis esos proyectos con las viajeras?
Las viajeras visitan y conocen esos proyectos, y conocen a las mujeres que allí trabajan, y a los niños que intentamos ayudar para que salgan de las condiciones de pobreza en las que viven… Es una parte de la que nos sentimos muy orgullosas porque generan un impacto, porque realmente cuando apoyas una iniciativa de género, el apoyo es mucho mayor, porque en el fondo quien tira de la familia en estos entornos es la mujer. Nuestro objetivo con este tipo de acciones es trasladar esa mentalidad a la gente y que ésta sea consciente que no cuesta tanto ayudar a los demás. Por eso, llevamos a nuestras viajeras a visitar esos proyectos, que vean a dónde va su dinero y entiendan por qué se destina allí y, en cierta manera, se vinculen con ello.
18. Un pilar que se basa en el turismo responsable…
La relación entre los visitantes y la población del país debería ser beneficiosa para las dos partes- Por eso nosotras tenemos un código ético y vigilamos que nuestros proveedores cumplan con él. Para nosotras es prioritario trasladar ya a todo el mundo esa mentalidad de turismo responsable, un turismo de impacto positivo.
¡Muy buena entrevista! Un poco de envidia por no poder participar en este tipo de viajes ;P pero lo recomendaré. Bienvenida en tu regreso bloguero, Laura, esto es hacerlo con fuerza!!