Al salir de una estación…

 

 

 

 

 

 

 

 

Salía del primer túnel de aquella línea de los Ferrocarriles que tanto había transitado durante sus años de vida universitaria. Pensaba en los niños vestiditos de uniforme que se dirigían a los coles de Sant Cugat, a los postadolescentes empezando cualquier carrera con sus carpetas corporativas en la mano, en los perezosos que se dormían al minuto dos de subirse al tren y en los melancólicos-soñadores que parecían no percibir a ninguno de los demás viajeros. Se preguntaba qué habría sido de todos ellos, cómo habrían seguido sus caminos, cuántos serían ya prefuturos directivos de grandes empresas…

Era un día gris y lluvioso. Frío para ser primavera. Un escalofrío la despertó de sus pensamientos y se sonrió a si misma al ver aquél chico mirándola disimuladamente. Seguro que pensaba que era otra de aquellas melancólicas-soñadoras que se aislaba del mundo en cualquier lugar… Y en realidad lo era en aquel momento. Sufría un período tremendamente nostálgico porque tenía la sensación de que se había perdido en algún punto, que algo había cambiado el rumbo de las cosas pero no sabía bien en qué dirección…

Echaba de menos muchas cosas. Subiendo la Rambla recordaba sus años de estudiante, las miles de citas para cines, fiestas, compras… o simplemente para hacer un café en el Original (en realidad, un Viena, el primero de todos), en el Antic o en el Cafè de la Rambla y arreglar el mundo con conversaciones que se alargaban hasta que el reloj marcaba la hora del último bus… «¡No, que se nos vuelve a escapar!». Y ahora que pasaba por delante de la uni, se acordaba de aquellas clases surrealistas, de buenos y no tan buenos profes, de compañeros con los que había compartido mil historias y de otros que pasaron fugazmente por su curso y desaparecieron a la misma velocidad…

Había sido y era tremendamente feliz, pero había algo que le rondaba por la cabeza y no sabía bien qué era… Tal vez sólo se trata que el tiempo pasa muy deprisa y que a veces cuesta asimilar las cosas, tal vez que necesita cerca a esa gente que ya no está y a la que echa de menos, tal vez que debería aprender a decir más las cosas directamente y en el momento preciso… Tal vez sólo sea cuestión de aprender a ser ella…

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